sábado, 2 de febrero de 2013

La Reserva Regional de las Lagunas de Villafáfila ocupa una extensión total de treinta y dos mil hectáreas y acoge más de ciento diez clasificaciones de aves, entre ellas el diez por ciento de la población mundial de avutardas.
La impermeabilidad del suelo de este espacio natural favorece que el agua inunde grandes extensiones de terreno, formando distintos humedales de pequeño tamaño y otros más considerables y de mayor importancia como La Laguna Grande, la de Barrillos y la de las Salinas.
En Otero de Sariegos se encuentra un observatorio desde el que, utilizando los dos telescopios allí instalados, se puede disfrutar de una excelente vista de la Laguna Salina Grande.
Este paisaje plano e inmenso constituye la segunda zona de invernada de aves de la península, después de las Marismas del Guadalquivir. Aquí pasan el invierno más de veinte mil ejemplares de ánsar común, el mayor de los gansos europeos, entre una lista infinita de aves.
Sólo el vuelo de estos ejemplares y los típicos palomares de barro, propios de Tierra de Campos rompen la monotonía de esta llanura húmeda.
En Otero de Sariegos se encuentra un observatorio desde el que, utilizando los dos telescopios allí instalados, se puede disfrutar de una excelente vista de la Laguna Salina Grande. Este es el lugar preferido por los ánsares, y cuando mejor se dejan ver, es al atardecer y al amanecer. A Otero se accede por una desviación a la izquierda que sale a mitad del camino por la carretera de va de Villafáfila a Villarírn. Otero de Sariegos, es un pequeño pueblo casi despoblado en el que sólo habitan dos matrimonios. Más al sur del espacio natural, se encuentra la comarca de Lamprea, denominado así por las lampreas, peces que se criaban en los viveros acondicionados del río Salado por los monjes del monasterio de Sahagún.
La Salina Grande es el lugar preferido por los ánsares, y cuando mejor se dejan ver, es al atardecer y al amanecer
A trece kilómetros al oeste de Villafáfila, se encuentra el pueblo de Moreruela y, a tres kilómetros de este punto, las imponentes ruinas del Monasterio del mismo nombre. A este edificio se le ha catalogado como el primero de los construidos por la orden del Cister en la península. Este refugio de monjes tuvo el beneplácito de los monarcas de León, de Castilla y de Portugal, así como de las familias nobles de Zamora.
DATOS PRACTICOS.- Centro de Interpretación. Es recomendable visitar el centro de interpretación como punto de partida para la observación de las lagunas. En él se puede solicitar información, ampliar conocimientos y organizar la ruta por las lagunas. Acoge una exposición sobre las características de este espacio con grandes paneles expositivos. También sirve como observatorio de aves. Está situado a la entrada de la localidad de Villafáfila y se puede visitar diferentes días de la semana. Cuando yo las visite las lagunas estaban secas y las aves eran las más comunes en la Tierra de Campos, las esteparias.
COMO LLEGAR Desde Madrid, por la carretera N-VI, a la altura de Villalpando, se toma el desvío que tras 18 kilómetros nos deja ya en este entorno. Desde Zamora, por la N-630, pasado Granja de Moreruela, parte un desvío a la derecha que lleva a Villafáfila.
Nota: con esta información se puede llegar, pero luego tiene su complejidad puesto que no hay muchas indicaciones y la gente tiene una vaga información sobre su propio patrimonio..., cosa que sorprende bastante. Al menos esa fue mi primera experiencia, así que otra parte de la excursión es la explorarión personal.
 

1 comentario:

Anónimo dijo...

La letra es pequeña... es complicado leer en este blog...